Jeep, la legendaria marca de vehículos todo terreno, cumple este año su 75 aniversario; un evento que ha marcado su comunicación desde enero y que, en Australia, han decidido celebrar a su manera, adaptándolo a las peculiaridades de un país todavía por descubrir.
Apelando al espíritu aventurero de los australianos han desarrollado una acción tan original, que suena a disparate: regalar un terreno donde probar el Jeep.
La campaña, denominada Grand Land, está dedicada específicamente al modelo Grand Cherokee y ha sido creada por la agencia Cummings & Partners (Melbourne), con una propuesta estrechamente asociada a los atributos de la marca y, al mismo tiempo, muy centrada en el carácter de Australia y de los australianos.
El Jeep Grand Cherokee, dice la campaña, «is packed with features for any adventure, with everything you need for all terrain performance; the only thing missing is some way to drive it»: un vehículo equipado para todo tipo de aventuras, al que sólo le falta una cosa: un camino donde probarlo.
Para solucionar el problema, y ofrecer un lugar donde poner el coche al límite, la campaña sortea, entre quienes se acerquen a los concesionarios a probar el coche durante los meses de marzo y abril, un terreno donde experimentar con su Jeep.
La presentación del sorteo se hizo con un breve anuncio de televisión y, también, con una web dedicada donde, aparte de repasar los detalles del concurso, presentaba un mapa de Australia con 350 terrenos rurales, en distintos lugares del país, de entre los que el ganador podría elegir cuál quedarse.
No se trataba de terrenos pequeños: algunos tenían hasta 15 Hectáreas (unos 30 campos de fútbol), todos ellos visitables a través la web y valorados en 100.000 dólares.
Una campaña realmente original, que recogió en su día mucho interés por parte de los medios –y abundante publicidad ganada en prensa, televisión y medios sociales–, y que sin duda se adapta a las peculiaridades del país donde se emite. Una campaña de valores globales, adaptada localmente para mejorar su efectividad.